sábado, 22 de noviembre de 2008

Silencio...

Acompáñame, en el silencio de esta noche
que se vuelve fría sin tus abrazos.
Deja que las manos,
vuelen libres entre los recovecos de mi cuerpo.

Si solo pudiese un segundo,
perderme contigo entre las estrellas,
el mañana seria un arco iris
escrito con nuestras letras.

Dejaría que tu sonrisa envolviese mis misterios,
que mis pensamientos se involucren con los tuyos,
que tus manos entreguen vida
entrelazándose con las mías.

El error de haber tocado tus labios la primera vez
se deshace entre los deseos de tener tu cuerpo junto al mio.
La luz que ilumina mis escondidos te quiero,
aquel desconocido sentimiento que fluye por mi corazón.

Empapándome de tus besos,
mientras el reloj ya no da esos robados segundos,
le quito historias a las novelas
mientras tus dedos recorren mi cuerpo.

Me invento minutos, cuando ya pasan las veinticuatro horas,
mientras la hora veintiuno me espera en tu cama,
escondida entre tu espalda y
los deseos locos que han quedado en la noche,
desesperados, intentando una fuga


[Para ti, desde mi]

1 comentario:

Nel dijo...

Bueno... me imagino que aquí es otro el que debería comentar, pero si yo recibiera este precioso poema, caería a tus pies sin remedio, toda derretida...